Cuando llega una temporada, siempre nos abrazamos a una tendencia, es ley de vida (o de »moda» en este caso). En Primavera/Verano nos vemos inundados por bolsos realizados en PVC, estampados florales y técnicas de troquelados, que invaden todas las portadas de VOGUE o Marie Claire. En cambio, cuando bajan las temperaturas y se acerca la temporada Otoño/Invierno, impregna los bolsos más calentitos e invernales. Si en el 2016 fue el año de los bolsos furry, en este le toca el turno al terciopelo. Estos meses de octubre y noviembre se han estado viendo multitud de modelos con este cálido tejido.
Es suave, es elegante, es fashion, es versátil, pero ¡ojo! también es delicado. En portales de compra como Nêt-à-Porter, mytheresa o Luisa Via Roma no paran de anunciar sus novedades semanales y, en cada una de ellas, incluyen dos o tres modelos aterciopelados.
Todas las firmas de lujo se han abrazado a esta tendencia y no han tardado en presentar sus propuestas para el público millennial (y no tan millennial también). La pionera, sin duda, ha sido Miuccia Prada, apostando por unos modelos súper divertidos en este tejido.
Guarda el mismo diseño que el Cahier, el recién icónico nombrado de la firma italiana. Pero no te confundas al verlo. Para distinguirlos, la versión aterciopelada del Cahier incorpora la cinta central del cierre en piel. Un modelo que se ha podido ver en los StreetStyles de Milán y, por el momento, promete quedarse varios meses.
Es uno de los itBags de la temporada. Chiara Ferragni ya ha lucido el suyo en Instagram con multitud de looks posibles. Personalmente, prefiero la versión en piel aunque tengo que reconocer que en terciopelo impacta mucho más.
En solo dos años esta marca estadounidense, fundada por Virgil Abloh, se ha convertido en una de las más solicitadas del continente. En España muchas tiendas multifirmas, como la boutique Santa Eulalia de Barcelona, la están introduciendo. Sus modelos son simples pero muy característicos. Según el diseñador »no es una marca, es un proyecto artístico que lucha por combatir lo convencional».
Los bolsos de Manu Atelier son un must-have. No hay fashion victim que no tenga uno en su armario. Son modelos que juegan mucho con el vanguardismo y con algunas pinceladas arquitectónicas. Además, sus precios rondan desde los 3oo € hasta los 500 € aproximadamente con lo que la hace una firma accesible. Aunque el modelo de arriba parezca una mochila, en realidad es un mini clutch que puedes lucirlo de dos maneras diferentes.
El Lockett Petite de Jimmy Choo es uno de esos bolsos que se necesita tener en la vida. Su estética combina lo urban con lo sofisticado y es un icono que ha aparecido en muchísimas revistas. En terciopelo combinado con este color verde botella me parece una opción súper elegante.
He descubierto hace poco este bolso y ¡me encanta! No sé si por su diseño bombonera, por su tamaño pequeño o por este tejido aterciopelado que le confiere un aire juvenil y dulce.
Lucia, Lucia, Lucia, que tendrás que hace poco aterrizaste en la familia de Dolce & Gabbana y ya te has proclamado un icono de la firma italiana. Y en efecto, Lucia es el nombre de la colección y este es en formato bandolera. Esta temporada, uno de los colores que más impregnará será la gama de los rojos, de ahí que haya escogido este.
El Marmont de Gucci es la nueva estrella de la firma italiana. Su modelo en riñera es uno de los must-have, itbag, imprescindibles y todo lo que tenga que ver con »tenlo o morirás en el anonimato». Lo que más me gusta es la combinación con el hardware dorado y esos adornos tan brillantes que me fascinan.
Después de ver toda esta lista, ¿le das una oportunidad al terciopelo o te quedas con el furry?
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